Solo es necesario un beso, una tos, un contacto o incluso un mordisco para cambiar nuestra vida y la de quienes nos rodean, por meses y hasta por años.
En la mayoría de los casos, entre más cercanas sean a ti las personas, más grande el riesgo. Pero no siempre es tan simple.
Expertos en salud pública creen que estamos en el momento de mayor riesgo de la historia de experimentar brotes infecciosos a gran escala y pandemias globales como las que hemos visto antes: síndrome respiratorio agudo grave (o SARS, por sus siglas en inglés), gripe porcina, ébola y zika.